Un poco harto del "postureo" que se está poniendo de moda entre el mundo emprendedor:
Hay que fracasar! Si se fracasa no pasa nada y además se aprende.
Mi visión no es esa.
Lo primero que tenemos que definir es a que nos referimos cuando hablamos de fracasar o tener éxito.
Si limitamos la palabra triunfar a tener más o menos dinero, entonces si puedo estar de acuerdo.
En eso si que aunque en una ocasión se pierda dinero, hay que intentarlo de nuevo aplicando todo lo aprendido y no cometiendo los mismos errores que nos hicieron perder en la ocasión anterior.
¿Pero a eso porque le llamamos éxito?
Por tener más dinero, ¿se supone que tendremos más amigos? Seguramente si, ¿pero son amigos de los de verdad o de conveniencia? Los de verdad quieren de nosotros nuestro tiempo, nuestro consejo,nuestro apoyo etc
Por tener más dinero, ¿seremos más felices? Disfrutaremos de más bienes, sin duda, pero poseer mucho no da la felicidad. No se valoran las cosas. La felicidad es otra cosa
Por tener más dinero ¿Nuestros hijos nos querrán más? Si los hemos educado en los valores adecuados lo que esperan de nosotros es que seamos un ejemplo para ellos, pero un ejemplo de vida, De saber compartir muchas horas con ellos, jugar con ellos cuando son pequeños,educarlos, saber ver en lo que son buenos y ayudarles a descubrirlo, apoyarlos cuando son adolescentes, y dejarles vivir su vida cuando ya son adultos, sabiendo ellos que estamos hay para lo que haga falta.
Por tener más dinero ¿nuestro matrimonio será más estable? : Los hay que piensan que si! Son aquellos que cuando se deshacen llevan adjunta una importante factura y fractura. Si dos personas se quieren esperan, la una de la otra otros valores: amor, amistad, complicidad, sexo, proyecto de vida compartido, etc.
Pues hay muchos emprendedores que por tener éxito- conseguir tener mucho dinero-no miden sus fuerzas y desatienden estos otros aspectos de la vida, que son los importantes,y luego les pasan factura y muchas veces les llevan a un fracaso, pro no ya económico sino de vida. De este es más difícil levantarse.
Por eso yo digo que no hay que fracasar en modelo de vida, si además tenemos éxito como emprendedores y ganamos dinero mejor pero entonces nos sobreviene otro problema: Administrarlo bien, con conciencia, siendo generosos, agradecidos, solidarios etc...
Es mi modesta opinión.................
sábado, 24 de mayo de 2014
viernes, 2 de mayo de 2014
Los otros montes Gurugú
Últimamente hemos oído hablar con mucha frecuencia del Monte Gurugú donde muchas personas acampan durante días,semanas o meses a la espera de la situación propicia para dar el salto a una civilización que ellos creen les va a abrir las puertas del futuro.
Para ello todavía les queda salvar el último escollo, y no es nada baladí. Cada vez se lo ponen más difícil, Tres vallas, concertinas, cientos de guardias civiles etc.
Esas personas,son iguales que nosotros, sólo que tuvieron la poca fortuna de nacer en un continente especialmente pobre y más aún por debajo del Sahara.
Muchos de ellos tienen estudios y están preparados para realizar diferentes y cualificados trabajos.
Y eso,trabajo, es lo que vienen buscando para poder mantenerse, labrarse un futuro y ayudar a sus familias. Para ello luchan por saltar a Europa convencidos de que en este viejo continente encontrarán su oportunidad
.
Sin embargo con el soporte de una "legalidad"- ley de inmigración- se les maltrata, se les pega y se les devuelve a sus lugares de origen.
Pero ellos desconocen que en nuestro propio país tenemos otros montes Gurugú.
Gente que está atrincherada en su casa esperando a que los vengan a desahuciar por no poder pagar un alquiler o una hipoteca tras haberles "robado" sin ninguna culpa su trabajo.
Y los mimos que legislan contra los inmigrantes, legislan contra esta gente dando la razón a unos bancos que han tenido que ser rescatados por todos nosotros e incumpliendo, al mismo tiempo, el derecho constitucional que dicen que todos tenemos derecho a una vivienda digna.
También desconocen que esa misma gente se pasa por el forro otra ley.
La ley de dependencia, que reúne en otro Monte Gurugú, a miles de personas que no pueden atender a sus familiares dependientes por falta de recursos y malviven con lo que tienen.
Y son los mismos legisladores que hicieron la ley los que ahora la incumplen. ¿Y que pasa?. No pasa nada!
Tampoco saben que, al igual que ellos tienen que saltar una valla, muchos de nuestros jóvenes tienen que emigrar a otros países en búsqueda del trabajo que aquí se le niega.
Es otro monte Gurugú que reúne a miles de jóvenes que no encuentran trabajo en nuestro país.
La diferencia es que en este caso no hace falta ser un atleta. Es preciso hablar un idioma, tener coraje, alejarse de sus seres queridos y luego al igual que ellos, buscarse la vida pero como somos, por lo que parece, de otra casta, no se les pega, no les está esperando la policía al otro lado.
El problema es que los que gobiernan, nunca han tenido que salvar una valla en busca de su oportunidad, nunca han sido desahuciados, cobran dietas por vivir en sus viviendas, no les falta el dinero para poder atender a sus dependientes, y en la mayoría de los casos nunca han trabajado.
Muchos de ellos,solo han escalado posiciones dentro de una estructura partidista y quien empezó haciendo fotocopias o llevando cafés, sin más mérito que ser de la confianza de un superior, se verá recompensado con un cargo de gestor debidamente remunerado.
Para ello todavía les queda salvar el último escollo, y no es nada baladí. Cada vez se lo ponen más difícil, Tres vallas, concertinas, cientos de guardias civiles etc.
Esas personas,son iguales que nosotros, sólo que tuvieron la poca fortuna de nacer en un continente especialmente pobre y más aún por debajo del Sahara.
Muchos de ellos tienen estudios y están preparados para realizar diferentes y cualificados trabajos.
Y eso,trabajo, es lo que vienen buscando para poder mantenerse, labrarse un futuro y ayudar a sus familias. Para ello luchan por saltar a Europa convencidos de que en este viejo continente encontrarán su oportunidad
.
Sin embargo con el soporte de una "legalidad"- ley de inmigración- se les maltrata, se les pega y se les devuelve a sus lugares de origen.
Pero ellos desconocen que en nuestro propio país tenemos otros montes Gurugú.
Gente que está atrincherada en su casa esperando a que los vengan a desahuciar por no poder pagar un alquiler o una hipoteca tras haberles "robado" sin ninguna culpa su trabajo.
Y los mimos que legislan contra los inmigrantes, legislan contra esta gente dando la razón a unos bancos que han tenido que ser rescatados por todos nosotros e incumpliendo, al mismo tiempo, el derecho constitucional que dicen que todos tenemos derecho a una vivienda digna.
También desconocen que esa misma gente se pasa por el forro otra ley.
La ley de dependencia, que reúne en otro Monte Gurugú, a miles de personas que no pueden atender a sus familiares dependientes por falta de recursos y malviven con lo que tienen.
Y son los mismos legisladores que hicieron la ley los que ahora la incumplen. ¿Y que pasa?. No pasa nada!
Tampoco saben que, al igual que ellos tienen que saltar una valla, muchos de nuestros jóvenes tienen que emigrar a otros países en búsqueda del trabajo que aquí se le niega.
Es otro monte Gurugú que reúne a miles de jóvenes que no encuentran trabajo en nuestro país.
La diferencia es que en este caso no hace falta ser un atleta. Es preciso hablar un idioma, tener coraje, alejarse de sus seres queridos y luego al igual que ellos, buscarse la vida pero como somos, por lo que parece, de otra casta, no se les pega, no les está esperando la policía al otro lado.
El problema es que los que gobiernan, nunca han tenido que salvar una valla en busca de su oportunidad, nunca han sido desahuciados, cobran dietas por vivir en sus viviendas, no les falta el dinero para poder atender a sus dependientes, y en la mayoría de los casos nunca han trabajado.
Muchos de ellos,solo han escalado posiciones dentro de una estructura partidista y quien empezó haciendo fotocopias o llevando cafés, sin más mérito que ser de la confianza de un superior, se verá recompensado con un cargo de gestor debidamente remunerado.
lunes, 10 de marzo de 2014
¿Millonario o feliz?
Cuando una persona se lanza a emprender debería de tener claro cuál es el modelo de crecimiento que desea sabiendo lo que ello implica para lo bueno y para lo malo.
Demos por sentado que el emprendedor tiene ya un modelo de negocio, validado, que está generando los primeros ingresos.
Normalmente es en ese momento es cuando se empieza a buscar inversores que ayuden y faciliten un rápido crecimiento de la Startup.
Hay modelos de negocio en el que el árbol de decisiones, respecto al crecimiento,son binarias, es decir que o se crece muy rápidamente o no es viable el proyecto, lo cuál es lo mismo que decir: o se pone mucho dinero, (incorporar un inversor) o no es viable. En esos casos no hay margen y solo hay una opción.
No obstante la mayoría de las veces la decisión no es binaria sino que permite un crecimiento a diferentes velocidades.
Y es ahí donde entra la consideración : que prefiero ser ¿Millonario o feliz?. Evidentemente os preguntareis y ¿no se puede ser las dos cosas a la vez?.
Por supuesto que sí pero es muy difícil conseguirlo en un mismo "tempo" y ahora me explico:
La mayoría de los emprendedores se fijan en los casos de éxito más sonoros y ellos quieren ser uno más.
Para ello planifican un crecimiento exponencial que necesariamente debe de ir acompañado de importantes cantidades de dinero. El inversor de una StartUp no es un inversor estable hasta que se llega al escenario final. Mientras, los inversores, buscan un éxit en un plazo razonable.
Para conseguir un buen rendimiento de su inversión, como es lógico, ponen presión a los emprendedores para que a la mayor brevedad vayan consiguiendo los hitos que se habían marcado. Hay que ir buscando permanentemente,también, nuevos inversores que permitan éxits aceptables a los primeros y que además generen nuevos fondos para conseguir los nuevos hitos.
Probablemente ese es el camino para poder llegar a ser millonario aunque de todos lo que lo intentan son pocos los que realmente lo consiguen. Ahora bien, durante este proceso: ¿el emprendedor ha sido feliz? ¿ha podido conciliar trabajo con ocio, familia,amigos? ¿O la presión por la consecución de objetivos y financiación le han llevado a una vida estresante, de mucho trabajo, y que muchas veces deja secuelas?
Frente a eso hay otro camino: Un crecimiento más sosegado,mucho más lento,sin depender de inversores, donde los hitos se los marca única y exclusivamente el emprendedor, que llegará hasta donde su ambición le exija y hasta donde sea capaz, pero al ritmo que entienda debe de llevar para que el trabajo no sea un obstáculo para su desarrollo personal, familiar, en definitiva buscando un equilibrio entre el trabajo y la vida personal que le proporcione un estado de bienestar que le acerca más a lo que comúnmente definiríamos como ser feliz. ¿Y podrá ser millonario o deberá de renunciar a ello?.
Si es feliz, que más da!, pero incluso aún así también puede llegar a ser millonario.
En definitiva,decide cuál de estos escenarios te atrae más. Los medios para alcanzar los objetivos se pueden conseguir.
Demos por sentado que el emprendedor tiene ya un modelo de negocio, validado, que está generando los primeros ingresos.
Normalmente es en ese momento es cuando se empieza a buscar inversores que ayuden y faciliten un rápido crecimiento de la Startup.
Hay modelos de negocio en el que el árbol de decisiones, respecto al crecimiento,son binarias, es decir que o se crece muy rápidamente o no es viable el proyecto, lo cuál es lo mismo que decir: o se pone mucho dinero, (incorporar un inversor) o no es viable. En esos casos no hay margen y solo hay una opción.
No obstante la mayoría de las veces la decisión no es binaria sino que permite un crecimiento a diferentes velocidades.
Y es ahí donde entra la consideración : que prefiero ser ¿Millonario o feliz?. Evidentemente os preguntareis y ¿no se puede ser las dos cosas a la vez?.
Por supuesto que sí pero es muy difícil conseguirlo en un mismo "tempo" y ahora me explico:
La mayoría de los emprendedores se fijan en los casos de éxito más sonoros y ellos quieren ser uno más.
Para ello planifican un crecimiento exponencial que necesariamente debe de ir acompañado de importantes cantidades de dinero. El inversor de una StartUp no es un inversor estable hasta que se llega al escenario final. Mientras, los inversores, buscan un éxit en un plazo razonable.
Para conseguir un buen rendimiento de su inversión, como es lógico, ponen presión a los emprendedores para que a la mayor brevedad vayan consiguiendo los hitos que se habían marcado. Hay que ir buscando permanentemente,también, nuevos inversores que permitan éxits aceptables a los primeros y que además generen nuevos fondos para conseguir los nuevos hitos.
Probablemente ese es el camino para poder llegar a ser millonario aunque de todos lo que lo intentan son pocos los que realmente lo consiguen. Ahora bien, durante este proceso: ¿el emprendedor ha sido feliz? ¿ha podido conciliar trabajo con ocio, familia,amigos? ¿O la presión por la consecución de objetivos y financiación le han llevado a una vida estresante, de mucho trabajo, y que muchas veces deja secuelas?
Frente a eso hay otro camino: Un crecimiento más sosegado,mucho más lento,sin depender de inversores, donde los hitos se los marca única y exclusivamente el emprendedor, que llegará hasta donde su ambición le exija y hasta donde sea capaz, pero al ritmo que entienda debe de llevar para que el trabajo no sea un obstáculo para su desarrollo personal, familiar, en definitiva buscando un equilibrio entre el trabajo y la vida personal que le proporcione un estado de bienestar que le acerca más a lo que comúnmente definiríamos como ser feliz. ¿Y podrá ser millonario o deberá de renunciar a ello?.
Si es feliz, que más da!, pero incluso aún así también puede llegar a ser millonario.
En definitiva,decide cuál de estos escenarios te atrae más. Los medios para alcanzar los objetivos se pueden conseguir.
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